Hace unos días nos llamó la atención una noticia sobre cómo en el estado de Hawaii van a prohibir el uso de cremas solares por su impacto medioambiental. El titular, que parecía abocarnos a un futuro de sombrillas y gorros, en realidad se refiere al uso de una de las más de 3500 cremas que utilizan componentes químicos derivados del petróleo. Específicamente, las cremas que utilizan oxibenzona y octinoxato. En el caso de la oxibenzona, un filtro químico de rayos ultravioleta, no sólo es nocivo para los corales, sino que además atraviesa la barrera de la piel, es altamente alérgico y una vez en el torrente sanguíneo produce el mismo efecto que las hormonas femeninas, el estrógeno. El octinoxato (octyl methoxicinamato) es un compuesto orgánico insoluble en el agua. Estudios para comprobar su toxicidad y cómo pueda afectar a nuestro ADN no han sido ratificados, pero sí que está comprobado su efecto sobre el medio ambiente marino.

Proporciones muy bajas diluidas en el agua afectan gravemente la capacidad de recuperación y regeneración del arrecife de coral, haciéndolo más vulnerable a cambios de temperatura y agresiones externas. El efecto de las cremas que utilizamos y que finalmente llegan a nuestros mares no es sino una de las amenazas a los corales, que también sufren con la pesca masiva, contaminación, calentamiento de temperaturas, desequilibrios químicos del agua y especies invasoras.

Nada es más fácil que evitar estas cremas y, de ese modo, poner nuestro granito de arena a favor del medio ambiente. Por eso, hemos elaborado un listado de cremas que no contienen ningún componente nocivo para nuestros océanos y además tampoco afectan a nuestro cuerpo. Además, puedes buscar tu marca favorita en herboristerías y centros naturales.