Encaramos la recta final de este año 2020, un año en el que hemos aprendido que lo impensable puede suceder.

A principios de año nuestra principal preocupación era celebrar el 50 aniversario de la empresa de una manera memorable para nuestra plantilla, nuestros huéspedes y nuestros vecinos. Queríamos ofrecer lo mejor de nosotros en una agenda de eventos, ofertas, concursos… Pero obviamente, como a todos nosotros, en Marzo se truncaron todos nuestros planes. El primero, de hecho, la fiesta aniversario cuyas invitaciones preparamos y nunca llegamos a enviar.

Estos meses han sido dramáticos para todo el mundo. Un virus que venía como un maremoto del que creímos que podíamos deshacernos rápidamente y que ahora vemos que nos acompañará durante mucho tiempo. Una amenaza fantasma que parecía afectar sólo a lugares exóticos y lejanos pero que llamó y seguirá llamando a la puerta de muchas casas en España y Canarias.

En clave personal, el confinamiento ha sido un momento de autodescubrimiento. Los más pequeños de la casa nos han enseñado que saben ponerse a la altura de cualquier desafío. Los más frágiles nos han mostrado que tenemos que cuidar la salud, también la mental, que a veces depende de un pequeño paseo diario. La familia, los amigos, el hogar, la naturaleza y tantas otras cosas sencillas han recuperado su valor y su brillo. Hay tantas otras, objetos materiales la mayoría, que ya hemos dejado de echar de menos.

En clave empresarial el desconfinamiento primero y la nueva normalidad después han exigido mucha templanza, paciencia, adaptación y esperanza. Los ERTE y los préstamos avalados por el ICO han sido la salvación del tejido empresarial. Pocos, si no ninguno, habríamos logrado sobrevivir sin ellos. Un flotador que nos ha permitido capear lo peor de la pandemia y afrontar un futuro incierto.

Esta pandemia y sus consecuencias han sido un choque frontal para todos. Y nos gustaría pensar que de aquí vamos a salir más fuertes y mejores.

Tras el susto inicial y las dudas, en Los Telares estos meses los hemos aprovechado para hacer lo que mejor se nos da: crecer y evolucionar. Hemos echado a andar nuestra última apuesta: el Restaurante del PEG Los Telares. Hemos echado toda la carne en el asador preparando una propuesta gastronómica y de ocio para el verano, con conciertos todas las semanas y amplias zonas de terraza. La respuesta de nuestros huéspedes y clientes ha sido maravillosa. Con sus opiniones nos han ayudado a crecer y nos han animado a seguir en la buena dirección.

Y para rematar este último trimestre del año queremos seguir adelante con el impulso del que camina hacia lugares inexplorados, madurando una propuesta gastronómica que aproveche el producto de nuestra finca ecológica y de La Gomera en recetas tradicionales e innovadoras; adaptando nuevos espacios para comidas y cenas al aire libre; con una agenda de eventos culturales y musicales.